Desearía beber.me el café de tu mirada…
Pasaría mí vida en la miel de tu palabra;
Escondería mí sentimiento en una alborada.
Ojala encontrará razón a nuestra inexistencia
Y que alguien me dijere qué sería al materializar tus caricias
Tal vez sí me esfuerzo consiga plagarme de tus sonrisas
Y es que eres una de esas casualidades en mí existencia.
Ojala te me quedaras perpetuo e intacto,
Que el tiempo no consiguiese rozar tu retrato;
Que ni mis locuras sean capaces de quitar.nos
Que tus besos sean suficientes para quedar.nos.
Ojala me quedase junto a ti una vida entera
Que al despertarme sean tus ojos lo que me libera
Que me acompañes a no quedarme sola
Y entre tanto me ayudes a saltar una ola.
Ojala le sobren días a nuestra estadía
Desearía que no falten instantes en nuestras memorias
Que el tiempo no nos burle con su osadía
Y tal vez aprehendamos a cuidar.nos entre las norias.
Ojala te ayude a resolver el crucigrama en el periódico
Quizás podamos apartar dos entradas al espectáculo
Sentarnos en primera fila y reconocernos entre actos
Comer palomitas de mantequilla mientras te tacto.
Ojala me saliera una nueva prosa con que enamorarte
Quisiera hacer más que una rima poco extensa
Y que te la aprehendieras de memoria…
Que me la recitases en la oficina, o en el café de la gloria.
Ojala no te pesen mis arranques de no euforia;
Que ni las distancias imaginarias nos arranquen…
O que el murmullo de vos se pierda en el de aquel.
Y que te baste tener.me en periodos de fe transitoria.
Ojala te dijeses mío y me dijeses tuya
Porque para mí eres: mí él y yo tu ella.
Desearía supieras cuanto te pienso
Y que de mis decisiones no me arrepiento.
Y con seguridad te digo que…
Mentiría al buscar en ti algo que en mí no habitaba,
Esa necesidad extensa de sentir.me de nuevo,
Completamente y profundamente enamorada.
K-lú!