viernes, 26 de junio de 2009

Nada.

Desde hace mucho deje de pensarte como solìa hacerlo. Tu recuerdo dejo de doler y ahora el tenerte en mi mente es como almacenar un dato de trivia, es decìr, no me sirves para nada pero al mencionarte en una plática casual ya no me causas desconcierto.

Y como no ha de dolerte esto? Tú, príncipe de mis noches, dueño de mis ardores y blanco de mis caricias. Sé que la indiferencia causa mella en tì, pues al no tener el control pierdes los estribos y comienzas a cometer errores, como aquel donde mencionaste mi nombre, o cuando despertaste sudando pensandome a tu lado.

Nada en ti me sorprende y deberías ya saberlo. Nada perdìas con amarme como yo lo hacìa contigo, nada te costaba sentír un poco con mi amor y sincerarte un poco en vez de fingir agrado. El karma existe y ahora te das cuenta de ello.

Nada espero ya, ni venganza ni justicia, hace mucho deje de sentír y por ahora nada quiero ya. saber.







Luis Carbajal

No hay comentarios: